Decidimos quedarnos en Mestre porque los alojamientos eran más "baratos" que en la propia Venecia, en nuestro caso nos costo 185,40 € las 2 noches. El precio no incluye desayuno, en nuestro caso nunca bajamos ya que eran 7 euros por persona y nos pareció excesivamente paro para el servicio que ofrecían.
Cuando llegamos nos recibió el dueño del hotel, muy amable y simpático (cuando nos fuimos el ultimo día nos recordó que comentáramos el hotel en BOOKING y que le pusiéramos buena nota), no habla muy bien español pero nos entendimos perfectamente, tuvo el detalle de darnos un mapa de Venecia al llegar.
La decoración de la habitación es muy antigua como podéis ver. Nosotros decidimos quedarnos en este hotel porque estaba cerca de la estación de tren y porque tenia aire acondicionado, y no hay nada mejor que al acabar el día tirarse en la cama bien fresquitos.
La cama era muy cómoda, la televisión un poco pequeña, aunque nunca la llegamos a encender ya que llevábamos nuestro portátil. como podéis ver tenia un espejo, un escritorio grande y a cada lado de la cama una mesita y unos armarios individuales.
El baño era pequeñito, pero tenia todo lo necesario (te ponen artículos de baños) y además estában muy limpios.
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